Sabemos por las escrituras que Dios creó al hombre a su imagen (Génesis 1:27), sabemos que sopló aliento de vida en su nariz y le dio vida (Génesis 2:7), Pero, ¿cuál es el propósito? ¿Qué debemos hacer con nuestras vidas? ¿Cómo podemos glorificar a Dios en este mundo que Él hizo? ¿Cual es nuestra misión como varones?

El Evangelio nos da una misión; estamos llamados a ser representantes de Dios en este mundo. Se nos ha encomendado la tarea de ser embajadores y discípulos de Él, (2 Corintios 5:20).

La primera forma en que los hombres pueden glorificar a Dios en el mundo es viviendo la vida con fe y sin temor. El miedo nos impide hacer lo que hay que hacer. La persona que espera hasta sentirse segura antes de actuar nunca hará nada y por consiguiente no cumple con su propósito en este mundo,

Por eso debemos afrontar la vida con fe en Cristo y valor para ser valientes. Debemos tener esperanza porque Dios nos creó para triunfar sobre cualquier obstáculo que se nos presente. Dios nos llama a esforzarnos y ser valientes (Josué 1:6-9)

También somos llamados como hombres a vivir una vida disciplinada, lo que significa ser intencionales sobre cómo invertimos nuestro tiempo y dinero. Esta disciplina traerá orden a nuestras vidas, lo cual es necesario para el éxito y la felicidad a largo plazo. «Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio (disciplina)» (2º Timoteo 2:7).

Finalmente, los hombres deben estar presentes en su familia y en su comunidad. Estamos llamados a ser parte activa de las vidas que nos rodean para que puedan ver a Cristo obrando dentro de nuestra propia vida y, como resultado, se acerquen más a Él.

El propósito de un hombre en el plan de Dios es ser cabeza de familia. Se le ha dado este rol para cuidar y prepararse para las responsabilidades que tendrá como esposo, padre y líder en la sociedad.

Ser padre, hijo o hermano es una de las relaciones más importantes de la vida. Los hombres están llamados a amar y cuidar a nuestra familia, ser un líder en la sociedad, ser un líder servidor ayudando a otros.

Dios tiene la fórmula de vida perfecta establecida sobre cómo debemos vivir nuestras vidas como hombres:

– Glorificar a Dios con todo lo que está dentro de nosotros (Romanos 12:11).

– Amar a nuestra esposa como Cristo amó a la Iglesia (Efesios 24:25).

– Ser líder, proveedor y protector. (1 Timoteo 5:8)

– Cuidar de sus hijos para prepararlos para la edad adulta, enseñándoles valores y morales que ayudarán a guiar sus decisiones en la vida (Proverbios 22:15).

– Sea un líder en la sociedad siendo un ejemplo de un hombre temeroso de Dios (Tito 2:1-10).

Sin embargo, la verdad es que ser un líder nunca debe ser a expensas del bienestar de su familia o de su necesidad de él. De hecho, se necesita equilibrio y gracia para hacer ambas cosas con éxito. 

Varon Alpha es un movimiento que busca guiar a los hombres para que descubran todo el potencial que Dios les ha dado para lograr su propósito en cada área de sus vidas y para que reclamen su papel dentro de la familia y la sociedad. La visión de Varón Alpha Male es simple: Ser un movimiento comprometido con la transformación de la forma en que los hombres viven, aman, lideran, trabajan y oran. 

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Que el Eterno te bendiga,